3 consejos para manejar conflictos en las relaciones

Claro, las parejas dentro de una relación tienen diferencias. La realidad es que, hasta cierto nivel, tener una pareja que tiene una opinión, preferencias y perspectivas diferentes es probablemente lo que te hace amarlos. Pero hay una gran diferencia en aprender a manejar una diferencia en las preferencias de alimentos y preferencias de televisión y luego aprender a manejar valores completamente diferentes. Las grandes diferencias pueden terminar fácilmente una relación, pero eso no significa que tengan que hacerlo. Es totalmente posible aprender a gestionar una diferencia de valores con tu pareja.

Conciencia

El primer paso es ser consciente de las grandes diferencias de valores. Si ha estado en una relación por un tiempo, es posible que sea fácil de identificar. Si está en una nueva relación, este es un buen momento para tener la discusión sobre los valores, ya que a veces puede ser más fácil alejarse de una relación temprana. No se limite a mantener la conversación en las diferencias, asegúrese de mirar los «por qué». Deje que su pareja le explique por qué no quiere tener hijos y explíquele por qué usted sí. Hable sobre por qué eligió diferentes religiones. La importancia del «Por qué» es brindarle al socio antecedentes y comprensión, no para iniciar una discusión. Trate realmente de comprender por qué sus valores son diferentes. Esto es para darle una base de empatía, comprensión y, en última instancia, respeto por el futuro.

Elija sus batallas

No es esencial que tenga que estar de acuerdo en todos los valores en conflicto. Averigüe en qué se debe acordar y qué diferencias no les afectan tanto como pareja. Por ejemplo, tener hijos o no puede ser un valor importante para encontrar un compromiso para progresar en la relación. La diferencia de valor de qué práctica religiosa valoran como pareja, puede ser manejada sin compromiso.

Juntos o separados

Algo de individualidad es importante dentro de una relación. Mientras decide qué valores necesitará encontrar un compromiso para progresar en la relación, determine qué valores en conflicto son proyectos individuales y cuáles son proyectos para la pareja como un todo. Por ejemplo, si a un socio le gustaría priorizar su salud, hable sobre cuáles son las expectativas para el socio. Quizás sea importante que este sea un proyecto que aborden en pareja, ya que la comida chatarra en la casa será una tentación, y pasar más tiempo separados mientras uno de los socios va al gimnasio. Puede que este no sea el caso, ya que ambos pueden encontrar que este sea un proyecto individual.

En última instancia, un conflicto de valores puede ser difícil de manejar solo. Puede que lleves años en una relación comprometida y te des cuenta de que las cosas han cambiado. Tenga en cuenta los puntos en común que comparte como asociación y cómo sus diferencias lo benefician en su conjunto. Si necesita apoyo adicional para resolver estos conflictos de valores, un apoyo externo e imparcial puede ser útil, intente hablar con un psicólogo en Palma de Mallorca para resolver estas diferencias.